El lavado de manos es la acción de limpiarlas con agua y jabón, y su objetivo principal es desinfectarlas para prevenir la propagación de microorganismos que pueden ingresar a nuestro organismo a través de los ojos, la nariz y la boca. Las manos están en contacto frecuente con diversos elementos, como plantas, animales, objetos, otras manos, nuestro propio cuerpo y superficies, entre otros. Por esta razón, son una de las principales vías de transmisión de gérmenes y bacterias. Por lo tanto, es fundamental realizar el lavado de manos de manera adecuada y mantenerlas siempre limpias para proteger nuestra salud.
Importancia del lavado de manos
El lavado de manos ayuda a prevenir enfermedades gastrointestinales y respiratorias. Su principal objetivo es eliminar la suciedad, la materia orgánica, la flora transitoria y la flora residente, lo que contribuye a evitar la transmisión de microorganismos. Existen diversas formas de propagación de gérmenes, entre las que se incluyen: tocar manos sucias, cambiar pañales, consumir comida contaminada, las gotitas expulsadas al toser o estornudar, el contacto con superficies contaminadas y los fluidos corporales de personas enfermas. Por lo tanto, al entrar en contacto con estos gérmenes y llevar las manos a la nariz, la boca o los ojos, puedes estar infectándote.
Enfermedades que se pueden adquirir por no lavarse las manos
Son muchas las enfermedades que podemos evitar con el simple acto de lavarnos las manos. Entre ellas se encuentran: la gripe, neumonía, bronquitis, tosferina, resfriado común, cólera, diarrea, hepatitis A y E, disentería, fiebre tifoidea, conjuntivitis, salmonelosis, infecciones oculares, mononucleosis, neumococo, lombrices intestinales, influenza, virus sincitial respiratorio y COVID-19, entre otras. Es importante tener en cuenta que podemos adquirir cualquiera de estas enfermedades de diversas formas y sin darnos cuenta. Por esta razón, es fundamental comenzar con el hábito del lavado de manos en casa y reforzarlo en las escuelas.
Cada cuanto debemos lavarnos las manos
No hay un horario específico ni una cantidad exacta para el lavado de manos; esto depende de las actividades realizadas durante el día. Sin embargo, se recomienda lavarse las manos en los siguientes casos:
- Después de ir al baño (orinar o defecar).
- Después de cambiar un pañal.
- Después de tocar a la mascota, recoger sus excrementos o manipular alimentos para animales.
- Antes de comer, en cada comida.
- Antes de tocar a un bebé.
- Antes y después de administrar un medicamento o atender a un enfermo en casa.
- Al llegar a casa o a un lugar de comida, como un restaurante.
- Después de estornudar, toser o sonarse la nariz.
- Antes, durante y después de preparar los alimentos.
- Después de jugar.
- Después de sacar la basura.
Es importante realizar el lavado de manos de manera adecuada en estos momentos para prevenir enfermedades y proteger nuestra salud.
Técnica para el lavado de manos
Para realizar un lavado de manos efectivo y eliminar bacterias, virus y microorganismos patógenos presentes en las manos, el tiempo sugerido es de entre 15 y 30 segundos, frotando ambas manos con jabón. El procedimiento correcto para el lavado de manos es el siguiente:
1. Mojar las manos con agua y jabón.
2. Aplicar una cantidad moderada y adecuada de jabón.
3. Frotar las manos entre sí, cubriendo todas las superficies, incluyendo el dorso de las manos, entre los dedos y debajo de las uñas, durante 15 a 30 segundos.
4. Enjuagar bien las manos con abundante agua.
5. Secar las manos con una toalla limpia y seca, o dejándolas secar al aire.
Este procedimiento es clave para asegurar la eliminación de gérmenes y prevenir enfermedades. ¡Recuerda que un buen lavado de manos es una de las mejores formas de cuidar tu salud!
Recomendaciones
La mejor forma de enseñar el hábito de lavarse las manos es comenzando desde el hogar y reforzándolo en las instituciones educativas, para que tanto niños como adultos adquieran y mantengan esta práctica. Una vez realizado el lavado de manos, es importante no dejarlas húmedas, ya que la humedad favorece la transmisión de microorganismos. El lavado de manos es el mejor aliado en la prevención de enfermedades, y su papel es fundamental en el cuidado de la salud.
Además, es útil crear un ambiente que fomente este hábito, como colocar recordatorios visuales en los baños y enseñar a los niños canciones cortas que puedan cantar mientras se lavan las manos, asegurando así que lo hagan durante el tiempo recomendado. Recuerda que promover la higiene de las manos es una inversión en la salud de todos, compártelo con tus conocidos!!!!